Entrevista a Pilar Irigoien en Revista APD 10.º Aniversario
La sociedad pública aplicará a sus áreas de trabajo interno, así como a los proyectos de inversión que respalde, los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG) marcados en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y recogidos en la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Su directora gerente, Pilar Irigoien, explica que “existe una concienciación cada vez mayor de aplicar en la operativa diaria y, por ende, en los modelos de negocio, prácticas de sostenibilidad. La ciudadanía y, en especial las empresas, tenemos el deber de implantarlas y gestionarlas.”
Sodena buscará en todas sus actuaciones y proyectos, tanto a nivel interno como externo, la creación de valor sostenible en el largo plazo. Es una de las principales líneas de trabajo que la sociedad pública se ha marcado para este 2021. Con esta decisión, se continúa avanzando en un proceso de trabajo interno que inició hace ahora un lustro, sus responsables pretenden dos fines. Por un lado, ser una entidad pionera dentro de su sector en la aplicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) recogidos en la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Por el otro, completar los procesos de análisis que realizaba hasta el momento con la incorporación de criterios de sostenibilidad e inversión responsable. Así, además de la rentabilidad financiera, ya se cuantifican otros factores socioeconómicos que impactan en el territorio.
De todo ello hablamos con la directora gerente de Sodena, Pilar Irigoien, y, en especial, sobre los retos que su organización, así como el tejido productivo navarro deberán abordar para cumplir esta visión económica más inclusiva y responsable.
¿Por qué Sodena toma esta decisión? ¿Cuáles debieran ser las palancas estratégicas que debieran estar presentes y caracterizar a una inversión sostenible y responsable?
Sostenibilidad y rentabilidad están interconectadas. Aquellas empresas que han establecido su idea de negocio con criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo logran mejores resultados económicos. También, un mayor reconocimiento, reputación e imagen pública. Y esto se debe a que existe una concienciación cada vez mayor de aplicar en la operativa diaria y, por ende, en los modelos de negocio, prácticas de sostenibilidad. La ciudadanía y, en especial las empresas, tenemos el deber de implantarlas y gestionarlas; no pueden quedarse al margen de este debate.
Eso es lo que ha pretendido Sodena: adoptar los Principios de Inversión Responsable de Naciones Unidas y además dar un paso adelante para responder a esa demanda creciente de conocimiento que nos solicita la ciudadanía. Trabajar, en definitiva, desde una visión integral, responsable e inclusiva de la inversión que se realiza. De esta forma, queremos poner en un mismo nivel los datos económicos de los proyectos que decidamos respaldar con los beneficios que pueden aportar en materia ambiental, social, o de gobierno corporativo.
Sodena viene analizando desde 2016 cómo impacta a nivel socioeconómico el apoyo financiero realizado a través del capital riesgo desde su constitución en el año 1984. De hecho, una de las principales conclusiones de ese análisis es que las 180 empresas apoyadas en los últimos 34 años han tenido una tasa de crecimiento de empleo del 94 % frente al 44 % calculado para el total de las sociedades navarras. También presentan relevantes mejoras en otros parámetros económico y estratégicos como son la internacionalización, la inversión privada, la innovación o la tasa de supervivencia.
Además, Sodena tiene incorporado como parte de sus procesos de análisis de los proyectos en los que contempla un apoyo financiero, la consideración de factores socioeconómicos más allá de la rentabilidad financiera. En concreto, se tienen en cuenta aspectos como el compromiso fiscal, la creación de empleo, poniendo foco en el femenino y considerando el empleo inducido, o su grado de innovación e internacionalización. También, el compromiso con el territorio en términos de colaboración que se prevé mantener con proveedores y prestadores de servicios locales.
Mientas, a nivel interno, hemos incorporado a nuestro equipo buenas prácticas en materia de transparencia, igualdad, respecto a la diversidad o implantación de códigos éticos y de conducta. Igualmente, se prevén medidas de flexibilidad para nuestra plantilla.
¿Qué va a suponer para los proyectos y las inversiones que busquen su respaldo la aplicación de estos criterios?
Creemos que va a reforzarlos y, sobre todo, les permitirá demostrar su verdadero potencial y alinearse con una clara tendencia de futuro. Ahí están, sin ir más lejos, los últimos datos publicados por SpainSif, la plataforma de encuentro y referencia en materia de inversión sostenible y responsable en España. En su estudio “La inversión sostenible y responsable en España” constató que los activos nacionales gestionados con criterios de sostenibilidad han pasado de representar un 13 % en 2009 al 49 % apenas una década después. Estamos por tanto ante un escenario que presenta enormes oportunidades de desarrollo y crecimiento para nuestras organizaciones.
OTROS ÁMBITOS DE ACTUACIÓN
Además de las actuaciones en materia de inversión sostenible y responsable ¿tienen previsto incluir prácticas sostenibles en su operativa habitual?
Efectivamente, como complemento al proceso de análisis explicado anteriormente Sodena, incorporará la aplicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible
Se trata de acciones que pueden clasificarse grosso modo en tres grandes grupos: ambientales, sociales y de gobierno corporativo. En el primero de ellos se valorará, por ejemplo, una política clara de optimización de los materiales y recursos disponibles, la gestión o de los residuos o la vinculación que tiene el proyecto con la economía circular.
En el caso de los principios sociales, están las políticas de diversidad e igualdad de oportunidades entre los miembros de la organización, la calidad del empleo, la conciliación laboral, así como la defensa y promoción de los derechos humanos. Y, en gobierno corporativo, la aplicación de medidas éticas de integridad y transparencia, la lucha contra la corrupción o la aplicación de mecanismos de gestión de riesgos.
Junto al impulso que quieren dar desde Sodena a la inversión sostenible y responsable, ¿en qué otras materias van a incidir en este 2021?
El hecho de que, gracias a la vacuna, la sociedad esté cada vez más protegida frente a la COVID-19 unido a la llegada de los fondos europeos, a partir del segundo semestre del año, nos ayudará a afrontar un nuevo periodo. Una época de recuperación y nuevos retos en digitalización, movilidad sostenible y transición energética.
La agenda de Sodena vendrá marcada por el apoyo al Gobierno de Navarra, en lo que se refiere a la revisión de los retos de la Estrategia de Especialización Inteligente S3 Navarra, junto al Plan Reactivar Navarra / Nafarroa Suspertu; en toda la parte que supone apoyo financiero a las empresas tanto mediante la renovación de acuerdos con sociedades de garantía recíproca, como la capitalización de pymes que han tenido que apalancarse excesivamente como consecuencia de la COVID-19 y pueden ver frenados sus planes de crecimiento; y así como el apoyo financiero y colaboración en proyectos Next Generation UE para que puedan verse materializados y el arraigo de nuestro tejido empresarial. Además, seguiremos dedicando nuestra atención a las multinacionales implantadas en nuestro territorio y a las actuaciones encaminadas a potenciar Navarra como destino de inversión y el apoyo financiero a nuevas start-up.
Ante ese escenario, nuestra intención es facilitar el desarrollo de los proyectos que nos lleguen desde el sector privado para situar a Navarra como referencia en sostenibilidad e innovación entre sus regiones homólogas. Es el objetivo que siempre hemos perseguido con nuestro trabajo y que queda reflejado como indicaba antes en nuestra Estrategia de Especialización Inteligente.